La intoxicación masiva con licor adulterado en el sector de El Boliche en Barranquilla, ocurrido en las últimas semanas, encendió las alarmas de las autoridades, quienes de inmediato emprendieron los operativos contra esta práctica ilegal que en esta vez cobró la vida de 10 personas y dejó a otras con afectaciones.

La reciente incautación hecha por la Policía Metropolitana en el barrio Las Nieves fue aún más preocupante tras conocerse que, según información emitida por la institución, el inmueble en donde funcionaba una fábrica improvisada e ilegal de bebidas alcohólicas había sido objeto de extinción de dominio y que permanecía bajo la administración de la Sociedad de Activos Especiales (SAE).

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A partir de allí se generaron una serie de cuestionamientos que apuntaban a la falta de vigilancia, seguimiento y tenencia de estas propiedades por parte de la entidad del orden nacional.

Jaime Avendaño, director regional Caribe de la SAE, en declaraciones del 25 de septiembre, reconoció que hay más de 20 años de “abandono completo” de muchos inmuebles administrados por la entidad y que hasta ahora, bajo el Gobierno de Gustavo Petro, vienen realizando una labor de seguimiento, vigilancia y control para conocer el estado actual de las propiedades.

“En muchos de estos inmuebles hemos encontrado redes de microtráfico de drogas y, en este caso, redes orientadas a la producción de alcohol adulterado”, dijo en su momento a través de las redes de la SAE.

En ese sentido, señaló que la entidad avanza en el plan de recuperación de más de 37 mil inmuebles bajo medida de extinción de dominio, recuperando espacios ocupados irregularmente y vinculados a actividades ilícitas.

Bienes en el Caribe

Según datos entregados por la SAE a Zona Cero, actualmente hay 3.705 inmuebles en poder de la entidad en la región Caribe, de los cuales 797 se encuentran ubicados en la ruralidad y otros 2.908 en zonas urbanas.

La SAE posee en el departamento del Atlántico 1.047 inmuebles; en Bolívar 553; en Cesar 189; en Córdoba 1.261; en La Guajira 126; en el Magdalena 406 y en Sucre otras 123 propiedades bajo su administración.

En el Atlántico, de esos 1.047 inmuebles, 92 están en calidad de arriendo, 353 están desocupados, 6 con destinación específica a proyectos y 582 se encuentran ocupados. Hay 14 propiedades de las que aún no se tiene información sobre cuál es el estado de ocupación.

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Para el caso del departamento de Bolívar 86 inmuebles están arrendados, 162 en estado de desocupado, 10 con destinación a proyectos y 294 se encuentran ocupados. Hay un bien de los 553 que tiene este territorio que no se conoce su estado.

En el Cesar, que tiene 189 inmuebles, hay 28 arrendados, 5 con destinación a proyectos, 129 ocupados y 27 desocupados.

En el departamento de Córdoba, la SAE posee 1.261 bienes, de los cuales 75 están en arriendo, 6 destinados a proyectos, 572 ocupados, 606 desocupados y 2 inmuebles de los que no se tiene información.  

De los 126 inmuebles que hay en La Guajira, 8 están arrendados, 3 destinados a proyectos, 84 ocupados y 31 desocupados.

En Magdalena hay 406 bienes en administración de la SAE, de los cuales 202 están siendo ocupados, 7 con destinación específica, 45 arrendados, 129 desocupados y 23 de los que no se tiene información de su estado todavía.

Por último, en Sucre, de los 123 inmuebles que hay, 74 están ocupados, 3 con destinación específica, 30 desocupados y 16 en arriendo.

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Estado actual de los inmuebles

De acuerdo con la información suministrada por la SAE hay varios inmuebles en estado bueno, malo, regular y otros de los que aún no se cuenta con información tras, según dijo el director regional de la SAE en el Caribe, 20 años de “abandono total” del Estado colombiano.

En el Atlántico hay 239 inmuebles en buen estado, 453 en la categoría regular y 55 en un estado malo. Otros 300 carecen de información.

Bolívar cuenta con 152 en buen estado, 88 regular, 64 malo y 249 que aún no están categorizados.

En Cesar hay 39 inmuebles en buen estado, 93 en condiciones regulares, 21 en mal estado y 36 que no tienen datos.

Córdoba posee 186 bienes en buen estado, 805 regular y 53 en mal estado. Por otro lado, 217 faltan por información de las condiciones actuales.

En La Guajira, la SAE tiene 25 inmuebles en buen estado, otros 34 en condiciones regulares, 20 en la categoría de malo y 47 sin datos.

El departamento del Magdalena tiene 59 bienes que su estado es bueno, 106 regular, 48 malo y 193 que aún requieren visitas para revisar las condiciones actuales.  

En el caso de Sucre, 22 propiedades están en buen estado, 32 en condiciones regulares, 7 en mal estado y 62 carentes de información.

Administración de la SAE

Jaime Avendaño, director regional de la SAE en la región Caribe, contó en diálogo con Zona Cero el proceso de administración de la entidad sobre estos inmuebles en el país, principalmente en la zona que lidera.

Señaló que no es posible recuperar los inmuebles en alto grado de deterioro, debido al alto volumen de propiedades en poder de la SAE. En ese caso, el proceder de la entidad es poner estos bienes a la venta, así como están, aplicando un gran descuento, para que sea el comprador quien realice las inversiones necesarias para recuperarlo.

Indicó que la administración de los inmuebles se basa en un modelo de costo-beneficio, por lo que no saldría rentable arrendarlos (los que se encuentran en mal estado) debido a las inversiones que se requieren para hacerlos habitables.

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Advirtió que hay más de 20 años de abandono de muchos de los inmuebles que están en administración de la SAE, de los cuales muchos no se han visitado ni se sabe el estado actual en que se encuentran.

“En territorio estamos empezando a visitar cada uno de los inmuebles. LA SAE empezó a ser SAE solo hasta este Gobierno de Gustavo Petro que comenzó a preocuparse de cómo es esto y cómo funciona, dado que como eran inmuebles de la mafia, la gente no se preocupaba realmente de su uso o destinación”, expuso Avendaño.

Indicó que hay muchas cosas por arreglar en la SAE y en eso está la entidad, poniendo orden en la casa. Una de las acciones está siendo legalizar los inmuebles que se encuentran en estado de extinción para ayudar a campesinos en el país.

“Con esto se desarrolla una estrategia sencilla pero poderosa, porque además de la dignificación del inmueble, se les arrebata a las mafias, para dárselo al pueblo y poder construir justicia social. Con eso mostramos que los activos de la SAE pueden ser instrumentos usados para el desarrollo y el crecimiento social”, anotó.

Se refirió al inmueble que estaba siendo usado para actividades ilícitas como el procesamiento de licor adulterado. Precisó que la SAE está en la tarea de ir a visitar cada uno de ellos en el territorio y recuperarlos.

“En este ejercicio hemos encontrado mil y un problemas gigantes. Inmuebles en alto grado de abandono o inmuebles con alto potencial, básicamente en que el afectado, es decir, la persona que tiene presunción todavía vive en él. Hay todos los casos posibles, están ampliamente desarrollados en cualquier inmueble presente en el territorio colombiano que son o que están bajo la tutela de la administración de la SAE”, apuntó.